Historia? Parte 3

Salir por el lado sur de la ciudad. Parecía una buena idea, al menos en el papel. Ahora había que ponerla en práctica.
Atravesábamos las callejuelas sin problemas, escudándonos por lo oscuridad de la noche. No había luna en el cielo, pero sí las estrellas resplandecían.
Antes de  llegar al muro de la ciudad, subimos al tejado de una de las casas. Justo cuando estuvimos arriba, un guardia dobla la esquina para avanzar por la calle en la que íbamos. Permanecimos quietos mientras éste avanzaba por entre las casas, sin notar nuestra presencia. Una vez alejado el peligro, nos desplazamos por sobre los techos, evitando hacer ruido, hasta llegar al muro. Una callejuela separaba el tejado de la última casa con el muro. Tal como habíamos planeado, amarramos la cuerda a la chimenea de la casa, y el otro extremo lo lanzamos con una flecha hacía el muro, donde quedó firmemente sujeto. Colgados de manos y pies llegamos hasta la muralla donde nos sentamos en la parte más alta. Cortamos la cuerda utilizada y la escondimos, de modo que nadie se enterara que alguien había salido de la ciudad.
Esperamos hasta que ningún guardia pasaba bajo el muro, saltamos y nos escabullimos entre los arbustos. Nos alejamos hacía el sur lo más que pudimos aquella noche. Luego de varios kilómetros a través del campo, decidimos seguir el camino. Al fin y al cabo, nadie nos seguía aún.
Apenas llegaba el amanecer cuando decidimos tomar un descanso. Paramos en un bosque adyacente al camino, y luego de adentrarnos un tanto, decidimos dormir sobre los árboles, amarrándonos para no caer. Dado que no llevábamos animales, era difícil que alguien supiese que estábamos ahí.
Finruk hablo entonces:
-"Para llegar a la Cueva del Sabio, primero debemos atravesar los Pantanos de la Luz, cruzar el Bosque Gris, y adentrarnos en las Montañas Pupunich".
-"¿Cuanto nos demoraremos en llegar hasta allá?"
-"Algunos días, o semanas. Depende de si logramos conseguir caballos o no".
-"Entonces no hay tiempo que perder. Partamos al amanecer".